El martes 8 de octubre de 2024 se celebró en Kermaria, en Trois-Rivières, una asamblea de acción de gracias al Señor, marcada por una solemne Eucaristía.  Fue presidida por Mons. Martin Laliberté, Obispo de la Diócesis de Trois-Rivières, acompañado por sus dos Cancilleres y los sacerdotes celebrantes en nuestra Residencia Lokia.  Durante esta celebración hemos vivido el acontecimiento de la desacralización de la capilla que cuente con 90 años de existencia.

“Hay un tiempo para mirar el pasado con reconocimiento y gratitud,

y un tiempo para abrazar el futuro con confianza”.

Sr Patricia, Supérieure Generale

Hijas de Jesús, Asociados(as), Religiosas de Congregaciones que comparten nuestra vida cotidiana en la Residencia, representantes de las Habitaciones Populares du Québec, colaboradoras y amigas(os): una Asamblea habitada por reconocimiento, de recuerdos duraderos, de pesares y de confianza al mismo tiempo, abierta a un futuro de solidaridad fraterna.

Respeto apreciado

El proyecto para transformar Kermaría en 69 unidades de vivienda de bajo costo preservará el patrimonio religioso, arquitectónico y cultural de la capilla. Este último se encuentra entre los monumentos religiosos más bellos de la Provincia de Quebec y constituye una de las mejores ilustraciones del arte gótico en Canadá.  Fue inaugurado durante el centenario de la Congregación, el 25 de noviembre de 1934, bajo el nombre de San José de Kermaría.

Símbolos que suenan

A lo largo de la celebración eucarística, diversos símbolos resonaron profundamente en nosotras, dando pleno significado al momento difícil que estábamos viviendo:

– Unos Ofrecimientos significativos: la foto de nuestra hermosa capilla, tan rica de preciosos recuerdos, ofrecida por nuestra hermana Jeanne d’Arc Lachance, de 101 años, y el voluminoso rollo de los planes de transformación de Kermaría, presentado por el Presidente de Habitaciones Populares, Sr. Ghislain Aubin. y Hna. Monique Brûlé, hj.

– El gran cirio encendido en el momento del recuerdo de la difunta hizo presentes a todas nuestras Hermanas fallecidas desde 1902 hasta hoy.

– El sagrario abierto y el retiro de los vasos sagrados.

Mons. Martin Laliberté, Obispo de Trois-Rivières, entrega a Hna. Micheline Cormier, Régionale, le decreto de la desacralizacion de la capilla San José de Kermaría.

– La procesión de salida precedida por el cirio pascual encendido y la palabra de Dios que va delante de nosotras y camina con nosotras en nuestro camino a Emmaús.

– El vaso de la amistada prolongó el intenso momento vivido al compartir nuestras emociones y tantos recuerdos comunes y variados al mismo tiempo.

Enviadas nuevamente hoy

Esta celebración ha marcado un “Pasaje” muy emotivo vivido en Acción de Gracias por tantos beneficios recibidos a lo largo de nuestra historia como Hijas de Jesús en Canadá.

Enviadas por Monseñor para anunciar la Buena Noticia de una historia de vida que continúa, damos una respuesta a personas vulnerables que sufren la gran crisis alojamiento en Trois-Rivières.  Nuestro despojo, como el grano de trigo, da nueva vida.

Para nosotras, Hijas de Jesús, además del tesoro que constituye su arquitectura, esta capilla es un símbolo del tesoro que varias generaciones de Hijas de Jesús de todo Canadá han acogido en sus vidas, al pronunciar su compromiso como mujeres consagradas a Dios. y a la misión, según el carisma de las Hijas de Jesús.

Llevamos un Tesoro en vasijas de barro, que compartimos con nuestros hermanos y hermanas Asociados y que estamos felices de transmitir, de otra forma, a las personas que vendrán a vivir o trabajar bajo este techo de Kermaría, protegido por San José de Kermaría y Nuestra Señora de  la Luz.

El despojo de nuestra capilla desacralizada profundiza en nosotras el deseo de desear llegar a ser cada vez más “piedras vivas” dentro de nuestra gran familia y de la Iglesia.

Desde el fondo de mi corazón

Gracias a Micheline, nuestra Regional, y a los miembros del gran equipo que, desde hace semanas, han desarrollado el programa hasta el más mínimo detalle y a todos los colaboradores que, en la sombra, aportaron sus habilidades a una fraternidad al gusto del Evangelio.

¡Gracias a nuestra Congregación que, a través de los múltiples mensajes recibidos de todos los países donde estamos, ha hecho visible nuestro gran cuerpo fraterno y misionero!

Lucie Larouche, hj.

Trois-Rivières, Canadá