Nuestra fe nos permite ver en nuestra historia, la huella del Espíritu obrando en medio de nosotras. Nuestra Congregación es ‘el fruto de una lenta germinación y de una larga paciencia de Dios’. Ya Dios nos ha adelantado y lo hace siempre. Releyendo nuestro pasado y el pasado de las familias religiosas que nos están unidas, estamos maravilladas por lo imprevisto de Dios.
Una serie de encuentros teje para nosotras una historia nueva:
En 1970, es reconocida por Roma, una unión entre las Hijas de Jesús de Kermaría y la comunidad contemplativa de la Acción de Gracias de Mauron. Es un llamado a vivir una nueva apertura por ambas partes. Esta unión traza la línea de la acción de gracias que va a surgir de esta aventura inédita.
En 1990, las hermanas de la Inmaculada Concepción fusionan con las Hijas de Jesús de Kermaría. Dios obra a través del encuentro de historias humanas injertas una en la otra, en una comunión en Cristo quien llama a proseguir su misión en Iglesia.
Entre los años 2000 y 2011, se produce un encuentro inédito entre las Hijas de Jesús de Vaylats y las Hijas de Jesús de Kermaría. Es el comienzo de un andar juntas en un camino de colaboración que llega a ser con el tiempo un camino de comunión y de alianza sellada en el 2011.
2011
1990
1970
Los caminos de Dios son un misterio. Su gracia habita nuestras historias y nos hace desplegar más ampliamente un carisma que se enriquece por el compartir
4 fundaciones, 4 rostros de un carisma compartido
1820
Hijas de Jesús de Vaylats
Dar testimonio del rostro de Jesús, Verbo encarnado,
ternura de Dios para con todo hombre
Jean Liausu
Françoise Dorval
Gaceta
Pierre Noury
Yves-Marie Coëffic
1834
Hijas de Jesus de Kermaria
Honrar la Humanidad Santa del Hijo de Dios;
En un camino de de humanidad,
a la manera de Jesús.