El noviciado es un tiempo de formación de muchos niveles, de los cuales el de “Tejer lazos de fraternidad”.
El noviciado de las Hijas de Jesús en Ngaoundéré, ciudad del norte de Camerún, situada en medio del barrio universitario, implica necesariamente una proximidad con los estudiantes, pero no solamente con ellos.
Durante el año, nuestra vivencia cotidiana nos permitió crear lazos de fraternidad con vecinos cercanos:
- Sencillos “buenos días” “sanu” “ossoko”…
- Compras de algunas verduras…
- Atención comunitaria a un niño enfermo y su familia…
- Relaciones día a día con nuestros empleados…
El cuatro de Enero pasado, para celebrar Navidad y el principio del Año Nuevo, hemos reunido a los niños de los empleados con los de nuestros vecinos.
Sorpresa y alegría de ver a treinta niños, todos tan bonitos los unos que los otros, de todas edades, todas lenguas y religiones.
Cantos, juegos, cuentos, animados por las novicias y una buena merienda y unos pastelitos para completar la fiesta.
Alegría dada, alegría recibida…
Sin tener que ir lejos, nuestras periferias se encuentran a nuestra puerta.
¡FELIZ AÑO NUEVO de PROXIMIDAD!
Comunidad del noviciado
Gracias al noviciado de Africa por compartir con todas lo que han vivido en Navidad, son experiencias que nos permiten tejer lazos de fraternidad. Que alegría poder ver rostros conocidos y por supuesto ver el patio de la casa, lugar conocido par mi.¡Bravo y animo!