La hermana Estelle Koffi, Hija de Jesús y responsable del Centro Madre de Misericordia en Brobo, Costa de Marfil, nos comparte cómo los niños con discapacidad celebraron la Navidad.
Como de costumbre en Brobo, la celebración de la Navidad es siempre especial en nuestros amigos de Madre de Misericordia. Dios desciende en nuestras fragilidades humanas, comparte su alegría con los más desposeídos, rechazados por nuestra sociedad. Nos interpela una vez más sobre la mirada que tenemos sobre nuestro prójimo y los marginalizados.
Acoger esta Buena Noticia
Es por eso que la Navidad es un acontecimiento ineludible para los niños, sobre todo los niños de Madre de Misericordia. La fiesta empezó con la mini-velada al descubrimiento del nacimiento de Cristo y de la manera como acogemos esta Buena Noticia que viene de Dios. Esta velada se terminó con cantos y danzas muy animados ¡alrededor del Árbol de Navidad!
Un San Nicolás Akán
Al día siguiente, los niños, incansables, ejecutaron nuevamente unos cantos y danzas para acoger la llegada de San Nicolas.
Este año, ¡sorpresa! San Nicolás se presentó como Rey Akán, vestido con su traje tradicional. Los Akanes son la etnia mayoritaria de esta región de Costa de Marfil donde se sitúa Brobo. Este San Nicolás, Rey Akán, simbolizaba la cultura. Mostraba un rey que viene al encuentro de sus pequeños compañeros en su modesta y a veces difícil condición de vida. Venía a darles un poco de alegría a través de sus regalos.
Alegría en los rostros
Jesús, “Nuestro gran rey, el Emanuel, rey sin palacio, rey sin ejercito”, nos lleva en su humildad y nos da de amar a los más pequeños, los más heridos, de nuestros hermanos y hermanas y leer la alegría en su rostro.
Hna Estelle Koffi hj
Brobo, Costa de Marfil
Hola Estelle
Que bello para los niños y niñas descubrir que Jesús comparte nuestra fragilidad, nuestra pequeñez. Como todos los bebes que llegan al mundo dan mucha alegría y ternura.
Feliz Navidad