Ya nos habían invitado a finalizar el año 2016 -ya rico en encuentros comunitarios regulares- con un compartir orante, en el que cada una podía expresar lo que surgía de su corazón al mirar el año transcurrido.

Nuestras Hermanas vecinas (Lalbenque y Cahors) se habían juntado con nosotras como también algunas que estaban de paso (Libos y Latronquière), felices de participar del compartir

Cada una fue invitada a escribir su oración personal en una estrella: todas las estrellas formarían una cadena expuesta en el pesebre. Hubo 27 estrellas que expresaban un “gracias”, una súplica, una palabra del Evangelio, un impulso espontáneo del corazón…

Aquí van algunos pasajes al azar:

“Te doy gracias por todos los que, ese año, vivieron el camino jubilar, por los que vivieron y descubrieron intensamente las obras de misericordia cerca de sus más cercanos.”

 

 

“Gracias:

• por los 600 jóvenes que peregrinaron a Lourdes para la Pascua,
• por los millares de jóvenes en Cracovia en julio del año 2016,
• y por los millares que están ahora en Riga (Letonia)”.

 

“Gracias por esos encuentros con los enfermos que pusiste’ en mi camino: ¡cuántos sufrimientos!, ¡cuántos hogares rotos! Pero también ¡cuántas acogidas! ¡cuántos encuentros en la fe!”

 

“Perdón por nuestras indiferencias frente a las situaciones crueles de hoy: hambre, violencia, torturas… ¡Venga la paz en Siria martirizada!”

• ” Te doy gracias por la Santa Misa diariamente.”
• ” Gracias por todos los pequeños gestos de paz que vemos entre nosotras.”
• ” Gracias por estar aquí.”

 

La linda guirnalda de estrellas con distintos colores fue dejada en el pesebre:

¡magnífico símbolo de unidad en la diversidad!”

Hermana Ste Thérèse y Hermanas de la comunidad de Vaylats