Del 11 al 17 de octubre se vivió en Kermaria (Francia) el primer encuentro internacional de los(as) asociados(as) de la Congregación de las Hijas de Jesús.

Hoy, alrededor de 500 personas son miembros asociados a nuestra Congregación.

7 delegados(as) de los distintos países se encontraron en los lugares de origen de la Congregación con algunas hermanas que acompañan a los grupos.

Para

• Juan Luis, de Camerún,
• Carole y Réjean, de Canada,
• Geraldine, de Chile,
• Omar, de Colombia
• Andrea y Juan, de Francia,

 

fue :

• una semana de compartir de la vida de los(as) asociados(as) de los distintos países, de su compromiso en sus ambientes de vida

 

• una semana de búsqueda de los rasgos específicos de la identidad de los(as) asociados(as) de la Congregación

 

• un tiempo de profundización de lo que los pone en marcha, de lo que los sostiene en su vida de creyentes

 

• una puesta en relieve de lo que es esencial para su compromiso a fin de integrarlo en un documento de referencia dirigido al conjunto de los asociados(as): Fundamento de su compromiso, actitudes y medios para vivirlo, relaciones con las Hermanas de la Congregación…

 

• 
  Una peregrinación a la Casa Madre de Kermaria y a los lugares de fundación de la Congregación

 

• Un tiempo de encuentros con Hermanas y miembros de equipos de asociados(as) de Bretaña.

 

Descubrimientos :

• El encuentro entre asociados de distintos países del mundo que siguen los pasos de nuestras fundadoras. Dijeron que SI para humanizar su rincón en su país a la manera de Jesús. Hoy sé que formamos parte de una gran familia: el espacio de nuestras tiendas se ensancharon en el compartir y los debates que actualizan nuestra realidad de asociados(as).

Réjean

• La vida de los asociados(as) en la internacionalidad ya no es una palabra vacía sino una realidad y una suerte.

Andrea

• Darse cuenta que otras personas, que viven realidades diferentes, tanto a nivel cultural cuanto a nivel sociologico, se sienten amados(as) por Dios y responsables de transmitir ese amor me llena de la esperanza que un mundo mejor es posible.

Geraldine

Momentos fuertes:

• El momento que me tocó de manera especial, es la visita en Bignan y Elizen. Nos permitió caminar en los pasos de la fundadora y, sobre todo para mí ya que soy constructor, ver una parte del muro de la casa de Perrine Samson después de más de 150 años…

Juan Luís

• La visita al museo donde se habló de los gestos de humanidad de las Hijas de Jesús durante la primera guerra mundial.

Carole

• La calidad de los intercambios entre nosotros en el respeto de la escucha para avanzar en la redaccion del librito. Los intercambios con las Hermanas en Kermaria, la emoción en el momento de la separación que no hubiera imaginado.

Juan

Reconozco que para mí el encuentro con cada Hija de Jesús y cada asociado fue un momento importante: encontrarnos entre nuestras culturas diferentes ; nuestras realidades diversas, nuestras maneras distintas de expresarnos, siendo profundamente unidos en nuestra humanidad.
Hemos experimentado, en profundidad, lo que significa «honrar la santa humanidad…», en la alegría, la escucha atenta, el rostro radiante de cada persona y hemos podido traducirlo en nuestros gestos a lo largo de esos encuentros.

Omar

Soy feliz de haber participado de ese encuentro muy rico, que permitió finalmente poner las bases de un documento

de referencia, en una gran calidad de intercambios y respetando las diferencias.

Andrea

Convicciones renforzadas

• 
  Ya que nos une un mismo carisma, caí en la cuenta de que hacemos los mismos gestos de humanización, que vivamos en Francia, en Africa, en América Latina o en Canadá ;

Carole

• 
  Con el testimonio de vida de nuestros fundadores, me queda solamente poner mi grano de arena para ayudar, yo también, a mejorar mi entorno y comprometerme siempre más a vivir a la manera de Jesús, como asociada a la Congregación de las Hijas de Jesús…

Geraldine

• 
  El encuentro me permitió plasmar mi lazo con la espiritualidad que nos une a todos(as) a la comunidad de las Hijas de Jesús. Formamos una GRAN FAMILIA con todas sus diversidades y de todos los horizontes. La maravilla que siento de llevarles a ustedes a mi oración está llena de la Vida y Alegría del Resucitado.

Réjean

• 
  Cada uno, donde vivamos, va a estar sostenido por la gran familia que formamos. Es un gran apoyo. Gracias una vez más por la confianza que animó esa semana de espiritualidad, de compartir, de amistad, de intercambio, de escucha, de esperanza también, que nos anima, a pesar de las grandes turbulencias que vivimos. El Espíritu Santo ha debido gozar de estar con nosotros!

Juan

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