Tras el apreciado descanso del sábado, el domingo reanudamos la marcha, escuchando en primer lugar el informe del Tesorero General.

Gestión de nuestro patrimonio

Es el momento de tomar conciencia juntos de nuestra realidad económica y de interrogarnos sobre la forma en que gestionamos nuestros bienes, fruto de nuestro compartir de hoy y de ayer.

El Papa Francisco y nuestra Regla de Vida (nº 86.5) nos recuerdan que nuestros bienes deben ser administrados :

« a la luz de la misión de evangelización de la Congregación

 y con especial atención a los necesitados.  » 

Nuevas formas de pobreza

 Por ello, se nos invita a estar atentas a las nuevas formas de pobreza en nuestro mundo y en los entornos en los que estamos insertas.  El contexto de las crecientes desigualdades cuestiona nuestra solidaridad y nos invita a tomar la medida de las conversiones que hay que vivir.

Discernir las llamadas

Durante la semana que comienza, seguiremos escuchando la Palabra de Dios, el Espíritu Santo y todo nuestro compartir grupal y congregacional para discernir las llamadas que el Señor nos dirige para los próximos seis años y lo que espera de nosotras para amar en acción.

« Hijitos míos, no amemos de palabra ni de lengua,

sino de hecho y en verdad.»

(1 Juan 3,18)                                                           

Contamos con su oración.