El sábado 26 de Abril, se reunieron en los salones de la Capilla Espíritu Santo, cuarenta asociadas(os) venidos de Santiago, Tucapel y Huépil en Chillán en la casa común de la comunidad anfitriona. Había caras nuevas, los pre-asociados, y el gozo del re-encuentro.
En un clima de mucha fraternidad y alegría, se desarrolló la propuesta de la jornada: conocernos mejor compartiendo, para estrechar los lazos de fraternidad que nos unen en torno a un Carisma común, el de seguir a Jesús, humanizando los ambientes donde vivimos y nos movemos.
El padre Raúl Manríquez acompañó el grupo y las hermanas del Sector. Él conoce desde mucho tiempo el Carisma de las Hijas de Jesús y lo aprecia muchísimo. Para la Diócesis de Chillán el Carisma ha sido un gran regalo.
La jornada preparada por el equipo hijas de Jesús y asociadas(os) de cada lugar, se desarrolló como una larga Eucaristía, integrando los momentos de escucha, con reflexión y compartir. Así, pasamos de la acogida con cantos y dinámicas a una reflexión en grupos, peticiones de perdón, la lectura de la Palabra que narra la Resurrección para compartir después en torno a la mesa común del almuerzo.
Por la tarde hubo trabajos en grupo, se trazó una orgánica para una mejor coordinación a futuro; el fruto de estos trabajos se ofreció al Señor en la liturgia eucarística con que concluimos la jornada en la capilla. Todo el ambiente debidamente dispuesto en círculo y cariñosamente adornado con un centro que es camino, nuestro camino de seguimiento.
Así terminamos nuestra jornada-liturgia en la común-unión y acción de gracias, enviando a nuestra hermana Jacqueline Dionne a su nueva misión en Canadá. Fue una hermosa y alentadora experiencia de fraternidad y búsqueda de fidelidad a Jesús, apreciada por todas(os).
Margaret Westwood HJ
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